martes, 20 de abril de 2010

Me estoy poniendo pensativa, recreando los instantes de mi vida, cuando caminaba con sueños inocentes y deseaba tener amigos diferentes; Aquellos que me aceptaran como soy, que me dieran compañía como la doy, pero pasaban de frente y para nada eran prudentes.. Fui conociendo personas amables, algunos sinceros, otros despreciables, pero de todo aprendes en la vida y la amistad es de verdad divina… Cuando al fin encuentras un amigo sincero, ese que te protegerá con el acero, te sientes completo y complacido, cuentas con él para todo, y conmovido.. En tus días difíciles y confundidos, te acompaña fuertemente y afligido, llora y ríe, te felicita y te reprime, es honesto y pendiente de ti vive… Tan preocupado de lo que te sucede, si te alejas, se inquieta y te presiente, pero sobre todo estará presente, y te amará, por siempre.